miércoles, diciembre 11, 2013

#NoSinEvidencia

MANIFIESTO

La evidencia científica es uno de los pilares sobre los que se asienta la medicina moderna. Esto no siempre ha sido así: durante años, se aplicaron tratamientos médicos sin comprobar previamente su eficacia y seguridad. Algunos fueron efectivos, aunque muchos tuvieron resultados desastrosos.
Sin embargo, en la época en la que más conocimientos científicos se acumulan de la historia de la humanidad, existen todavía pseudo-ciencias que pretenden, sin demostrar ninguna efectividad ni seguridad, pasar por disciplinas cercanas a la medicina y llegar a los pacientes.
Los firmantes de este manifiesto, profesionales sanitarios y de otras ramas de la ciencia, periodistas y otros, somos conscientes de que nuestra responsabilidad, tanto legal como ética, consiste en aportar el mejor tratamiento posible a los pacientes y velar por su salud. Por ello, la aparición en los medios de comunicación de noticias sobre la apertura de un proceso de regulación y aprobación de medicamentos homeopáticos nos preocupa como sanitarios, científicos y ciudadanos, y creemos que debemos actuar al respecto. Las declaraciones de la directora de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) asegurando que “no todos los medicamentos homeopáticos tienen que demostrar su eficacia” y que “la seguridad no se tiene que demostrar con ensayos clínicos específicos” no hacen sino aumentar nuestra preocupación.
Por lo tanto, solicitamos:
  1. Que no se apruebe ningún tratamiento que no haya demostrado, mediante ensayos clínicos reproducibles, unas condiciones de eficacia y seguridad al menos superiores a placebo. La regulación de unos supuestos medicamentos homeopáticos sin indicación terapéutica es una grave contradicción en sí misma y debe ser rechazada. Si no está indicado para nada ¿para qué hay que darlo?.
  2. Que la AEMPS retire de la comercialización aquellos fármacos, de cualquier tipo, que pese a haber sido aprobados, no hayan demostrado una eficacia mayor que el placebo o que presenten unos efectos adversos desproporcionados.
  3. Que el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y el resto de autoridades sanitarias persigan a aquellas empresas que atribuyen cualidades curativas o beneficiosas para la salud a sus productos sin haberlo demostrado científicamente.
  4. Que el Consejo General de Colegios de Médicos de España / Organización Médica Colegial, en cumplimiento del artículo 26 del Código de Deontología Médica, desapruebe a los facultativos que prescriban tratamientos sin evidencia científica demostrada.

viernes, junio 14, 2013

APRENDIENDO (Jorge Luis Borges)

Después de un tiempo, uno aprende la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar un alma, y uno aprende que el amor no significa acostarse y una compañía no significa seguridad, y uno empieza a aprender...

Que los besos no son contratos y los regalos no son promesas, y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos, y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy, porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes...y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad.

Y después de un tiempo uno aprende que si es demasiado, hasta el calor del sol quema. Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma, en lugar de esperar a que alguien le traiga flores. Y uno aprende que realmente puede aguantar, que uno realmente es fuerte, que uno realmente vale, y uno aprende y aprende... y con cada día uno aprende. Con el tiempo aprendes que estar con alguien porque te ofrece un buen futuro, significa que tarde o temprano querrás volver a tu pasado.

Con el tiempo comprendes que sólo quien es capaz de amarte con tus defectos, sin pretender cambiarte, puede brindarte toda la felicidad que deseas. Con el tiempo te das cuenta de que si estás al lado de esa persona sólo por acompañar tu soledad, irremediablemente acabarás no deseando volver a verla. Con el tiempo entiendes que los verdaderos amigos son contados, y que el que no lucha por ellos tarde o temprano se verá rodeado sólo de amistades falsas.

Con el tiempo aprendes que las palabras dichas en un momento de ira pueden seguir lastimando a quien heriste, durante toda la vida. Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar es sólo de almas grandes. Con el tiempo comprendes que si has herido a un amigo duramente, muy probablemente la amistad jamás volverá a ser igual. Con el tiempo te das cuenta que aunque seas feliz con tus amigos, algún día llorarás por aquellos! que dejaste ir. Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida con cada persona es irrepetible.

Con el tiempo te das cuenta de que el que humilla o desprecia a un ser humano, tarde o temprano sufrirá las mismas humillaciones o desprecios multiplicados al cuadrado. Con el tiempo aprendes a construir todos tus caminos en el hoy, porque el terreno del mañana es demasiado incierto para hacer planes. Con el tiempo comprendes que apresurar las cosas o forzarlas a que pasen ocasionará que al final no sean como esperabas. Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro, sino el momento que estabas viviendo justo en ese instante.

Con el tiempo verás que aunque seas feliz con los que están a tu lado,añorarás terriblemente a los que ayer estaban contigo y ahora se han marchado. Con el tiempo aprenderás que intentar perdonar o pedir perdón, decir que amas, decir que extrañas, decir que necesitas, decir que quieres ser amigo, ante una tumba, ya no tiene ningún sentido. Pero desafortunadamente, solo con el tiempo...

miércoles, mayo 01, 2013

sábado, marzo 30, 2013

Empezar a Explicarlo


EMPEZAR A EXPLICARLO

No sabría por donde empezar a explicarlo.
Yo venía embalado de un amor sin agujeros que se fue agrietando por culpa de
algunas faldas que se anunciaban como diciendo aquí estarías mejor.

Me vi con veintitantos imaginando
que ya no desnudaría otro cuerpo diferente.
Entonces pude haber seguido el ejemplo
de los hombres que mantienen el instinto al ralentí, olvidar los bares y sus
muchachas, pero la piel me pedía huracán y delirio.
Ya no llegaría a viejo con ella.

Cambié los sueños por los deseos
y rompí la vida en cien mil trozos
por la promesa de unos labios ajenos
intentando convencerme de que no era así, pensando que habría un fácil viaje
de vuelta.
Quizá os imaginéis el golpe.

A la segunda mujer hacía un año que la conocía.
No pude evitar nada y solapé dos sentimientos, el calor de una con el fuego
de la otra.
Fui dos hombres durante un tiempo,
el que buscaba seguridad
y el que pinchaba los airbags.

Por entonces, un tipo? y esto es verdad? me dijo:
Marwan, si tienes un tigre delante
puedes hacer dos cosas:huir o luchar (y matarlo). Las dos están bien.
Lo que no puedes es quedarte quieto
porque te destrozará.
Y durante meses me quedé quieto,
dudando entre el calor y el fuego,
el calor y el fuego,
la rutina o el desastre.

Mi madre también me habló:
Hijo mío, a veces lo mejor es enemigo de lo bueno.
Y yo ya no entendía nada.

Entretanto bajé a los suburbios de mí mismo, esos lugares que invitan al
placer pero no a la reflexión y mientras besaba a quemarropa cada seis
minutos me preguntaba si no sería mejor volver a mis veintipocos, al amor
confortable, al cuerpo cotidiano, esa plácida comarca sin sobresaltos donde
el placer te lo brinda la seguridad y no el riesgo, volver en definitiva a
mi chica, a las emociones pacíficas, utilizar la copia de seguridad de mi
pasado.

Con el tiempo entendí que ni lo uno ni lo otro me convenía pero ya nunca
regresé al hogar.
Me decanté por la llama de un amor
que se resistía a tener adjetivos.

Así ella y yo comenzamos
una de esas historias de cara o cruz
con la moneda siempre girando en el aire y todos los castillos de arena.
Un amor ambiguo donde siempre
era la víspera de todo
pero difícilmente el día de nada.
Un viaje tan a destiempo
que nunca llegamos al mismo sitio
sin que uno de los dos llevara encendidas las luces de reserva de su
corazón.
Y así mi calle ya nunca más
hizo esquina con París.

Si os soy sincero, lo más jodido de todo es no saber qué sucedería si
volviera a sentir lo mismo y tuviera que escoger entre el cuerpo al que amo
y el cuerpo que me hace arder.
No sé, no lo tengo claro.

"La Triste Historia de tu Cuerpo Sobre el Mío" - Marwan