Como otras tantas veces, se acabó un ciclo y empieza otro, por tiempo indefinido. Se acabó la tranquilidad, mi autoestima sosegada, poder sentirme útil e igual a los que me rodean. Se acabó dormir a pierna suelta y disfrutar el tiempo de ocio. Vuelvo, otra vez, a odiar los fines de semana, a no valorar mi tiempo. Aparecerá otra vez mi viejo amigo el insomnio a darme la noche, esperando un día que será igual que la noche en vela, pero con más compañía. Y continuaré persiguiendo, como otras tantas veces, las ocupaciones de los demás. Mendigaré sus ratos y me consumirá la incertidumbre. Lo siento de veras por aquellos que me rodean.
4 comentarios:
De un insomne crónico a replicante. Podemos comenzar una partida de ajedrez por correo, dicen que eso relaja. Paciencia con uno mismo.
¡¡Si es que trabajar es muy malo!! Y todo por culpa del tontaina del Adán... ¿o no fue así?
Pelotazo ya!! y nunca mais trabajar :)
Lo mejor para que a uno no se le agrie la vida es tomarlo con un poco mas de optimismo, miralo por el lado bueno...imaginando.... fijandote en .. en fin, seguro que algun lado bueno tiene.
Has probado con la loteria?.
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