No al puerto de Granadilla

Hoy voy a dejar a un lado mis paranoias y la filosofía de la vida cotidiana para hacer algo útil con mi blog. Quiero utilizar este pequeño rinconcito de red para hablar de uno de los mayores atentados ecológicos que se está realizando actualmente en Canarias.

Para comenzar, hay que aclarar el marco político - económico de Canarias actualmente. Hace tiempo que Canarias dejó de ser el paraiso de "Canarias, naturaleza cálida", que se vendía hace unos años. Cálida sí, naturaleza, poca. ¿Por qué esto es así?. Básicamente porque en estas pequeñas islas ha ocurrido el fenómeno especulativo que ha asolado toda España, pero elevado a la enésima potencia, dado lo limitado de nuestro territorio. Este boom inmobiliario a venido de la mano de una cláse política gobernante que, curiosamente, en su mayoría son empresarios de la construcción. Sobran los comentarios.

Entre muchas aberraciones ecológicas que se han comentido, y se están cometiendo, es de especial relevancia el llamado Macro Puerto de Granadilla. En este municipio del sur de la isla, "nuestros" políticos y empresarios ya han comenzado la construcción de un gigantesco puerto comercial e industrial, según ellos, totalmente imprescindible para el futuro económico de las islas. Por supuesto, esta es su versión. Estos señores olvidan que tenemos un puerto ya construído en la capital, el cual está a un 60% de capacidad debido a la falta de mantenimiento (es más rentable construir que arreglar). Además, perfectamente ampliable y mejorable, el cual es totalmente capaz de dar cabida al crecimiento futuro del comercio de las islas. Sin embargo, muchos especuladores intersados, encabezados por una clase política descaradamente enriquecida con la especulación inmobiliaria (solo decir que junto al futuro puerto de Granadilla está situada la fábrica de prismas portuarios de un antiguo presidente del gobierno de Canarias, qué casualidad) construirán un puerto que además de ser totalmente innecesario, destruirá kilómetros de playas naturales (que no abundan en una isla tan montañosa como Tenerife), kilómetros de una de las mayores praderas submarinas de España, sin contar con una catástrofe demográfica en una ya superpoblada isla. Es decir, en la construcción del macropuerto se construirán barrios enteros para dar techo a la ingente cantidad de población flotante que trabajará ahí (por supuesto, mano de obra barata procedente de la inmigración ilegal, y trabajadores sin cualificación). A la terminación del puerto, estos trabajadores no serán absorbidos por un moderno puerto que requerirá pocos trabajadores, dada su alta automatización, y que la mano de obra que necesite deberá ser cualificada. La economía canaria será incapaza de recolocar a esta gran cantidad de personas. Sin embargo, ya se habrán enriquecido los especuladores de turno, gracias a la construcción del puerto y la construcción de los barrios dormitorio. Debemos recordar que hace tiempo que el ladrillo es la única industria rentable en Canarias.

Estos señores ya han desestimado varios estudios realizados por organizaciones independientes, muchos que manifiestan que este puerto atenta contra la normativa europea de medio ambiente. Además, la UE ya se ha manifestado contraria a la construcción del puerto. Sin embargo, ahí siguen, poderoso caballero es Don Dinero, con una clase política que da la espalda a las multiples manifestaciones populares en contra (una de las últimas manifestaciones convocó 100.000 personas ).

En el siguiente enlace , y en este de Greenpeace pueden conseguir más información sobre este atentado ecológico y social.

Campaña de GreenPeace de envio de cartas protesta a los ministerios responsables contra el puerto de Granadilla.